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jueves, 3 de agosto de 2017

SEGURIDAD, ETICA Y LEGALIDAD





Sostenemos permanentemente que la práctica de la ingeniería implica actividades para favorecer a comunidades enteras, a ciudades, a pueblos. Es decir que mucha gente se ve beneficiada con los frutos de la tecnología, la ciencia y el conocimiento aplicados a la vida diaria. Por este motivo, se debe tener estricto control sobre la misma ya que cualquier “mala praxis” podría afectar y dañar la vida normal de una importante cantidad de personas. Sin dudas, “mala praxis de ingeniería” podría funcionar como sinónimo de catástrofe.
Este efecto multiplicador que posee la ingeniería, hace que la misma debe ejercerse bajo estrictas regulaciones y controles de ejercicio profesional. Tan importante es esta temática, que el Estado Provincial ha delegado en los Colegios Profesionales de Ley su poder como organismos de control. Solamente los Colegios de Ley pueden matricular, certificar y habilitar para el ejercicio profesional. Cabe aclarar, por su parte, que las asociaciones civiles de profesionales de cualquier tipo revisten el carácter de sociedades científicas persiguiendo un interés gremial, puntual y sectorial para sus asociados.
Así, en la búsqueda de institución de ley única para los ingenieros jujeños se crea el Colegio de Ingenieros de Jujuy en el año 1989 a través de la Ley 4430. Esta Ley permite nuclear a todos los ingenieros jujeños excepto a los Ingenieros Agrónomos, Agrimensores y Zootecnistas (que se matriculan en el Consejo Profesional correspondiente), brindando la matricula profesional pertinente para el ejercicio profesional legal.
Una matrícula profesional es algo fundamental. Sin matrícula no hay ingeniería posible, ya que no hay responsabilidad, ética ni seriedad. La matrícula profesional es el medio a través del cual se garantiza a la sociedad que el profesional ingeniero actuante ejerce como responsable absoluto de lo que desarrolla. Que esa persona que dice ser ingeniero puede actuar en la materia que lo convoca. Sin matrícula no hay responsabilidad legal, lo cual deja en una situación de desamparo a quien contrata fuera de la Ley, además de constituir lisa y llanamente ejercicio ilegal de la profesión. Un ingeniero bajo los preceptos del ejercicio profesional legal puede negarse a actuar si ello es contrario a la ética y a la seguridad. 
Continuando con el trabajo iniciado años atrás, tendientes a la jerarquización del ejercicio profesional, el Colegio de Ingenieros de Jujuy ha comenzado este año una campaña para promover la Seguridad, la Ética y la Legalidad como los valores principales que nos distinguen exclusivamente a través de la matrícula profesional. La sociedad debe conocer esto para exigir el cumplimiento de la Ley como principal garantía de seriedad y responsabilidad. Hoy por hoy, con sus acciones, el Colegio está velando por el ejercicio actual y futuro de la ingeniería, elevando la consideración de la ingeniería del pasado. Pero para ello, debe haber un cambio en el paradigma del ejercicio profesional y a eso apuntamos.
Una matrícula profesional es mucho más que un simple número. Es la importancia de pertenecer a un Colegio que trabaja sobre varios ejes estratégicos como la capacitación profesional, la divulgación de temas de ingeniería en la comunidad y el incentivo del estudio de la ingeniería en los más jóvenes mediante talleres vocacionales. Un organismo de Ley que colabora con los diferentes poderes del Estado, legisladores, académicos, vecinos, estudiantes, logrando articular de la mejor manera todos los esfuerzos para tener una ingeniería para  todos, participativa y abierta.
Una matrícula profesional garantiza ser parte de la integración regional que nuestro Colegio viene desarrollando en el Foro de la Ingeniería del NOA, asociación que nuclea a los Consejos y Colegios de Ingenieros de la región, donde se discuten temas que van mucho más allá del ámbito local como ser medio ambiente, conectividad, energía, infraestructura, transporte, ampliando la oferta educativa y de capacitación de primera línea, para los matriculados de la región, sin tener que viajar a las grandes ciudades del país. Es ser parte de las Federaciones de Ingeniería a nivel país.
Por su parte, con una matrícula los profesionales acceden a numerosos beneficios tendientes a darle calidad al ejercicio profesional: perfeccionamiento a costos razonables, vinculación profesional con organismos del Estado, universidades y privados, participación de Comisiones de Ingenieros Especialistas, divulgación de la temática ingenieril, búsqueda de empleos provincial y regional, además de velar por el cuidado y defensa de su ejercicio profesional, mediante herramientas que nos brinda la Ley, que protegen no solo sus honorarios sino también su propiedad intelectual.
No me canso de sostener que los ingenieros somos motores del cambio. A través de nuestro conocimiento, se hacen realidad los sueños de progreso de la sociedad. Por este motivo, el ingeniero moderno debe poseer una base fundacional de ética, compromiso social y legalidad que asegure a la comunidad que su actuación está guiada por esos preceptos, antes que por grandes conocimientos técnicos y tecnológicos carentes de valores. No podemos darnos el lujo de pensar una sociedad grande y de avanzada fundada en pies de barro. Y eso lo están viendo los nuevos matriculados y aquellos que se están por matricular, que aprecian Colegio de Ingenieros de Jujuy sólido desde lo institucional, democrático y participativo.
Por todo ello, una vez más, invitamos a nuestros colegas a acercarse al Colegio de Ingenieros de Jujuy (Ley 4430/89) única institución que tienen los Ingenieros Jujeños para participar en la construcción de una profesión legal y ética para beneficio de nuestro país.

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